Para evitar lesiones oculares, no utilices Lumea cerca ni sobre los ojos, los párpados o las cejas. Utiliza Lumea solo por debajo de los pómulos.
Nota: Nunca utilices Lumea en la barba de un hombre.
Para evitar molestias oculares, utiliza Lumea siempre en una habitación bien iluminada. Los ojos son más sensibles a la desviación de la luz en condiciones de oscuridad.